por su cumple...
q está más vieja que todas las otras mongas
incluyendome... lógico
bueno monse... porque 25 no se cumplen todos los días
aquí está tu tributo en vida.
=D
(nótese la fecha por favor, que no se diga que me atrasé con la entrega)

Entre un mundo desconocido y otro por conocer.
Lo he pensado harto, y llegué a la conclusión de que si tuviera que darle una “forma” a mi tristeza sería algo medio amorfo, esponjoso y grisáceo.
Y si hablamos de dimensiones, creo que no superaría los
Creo que con lo de forma tal vez no era ese el sentido, pero, tiendo a ser literal… y la verdad, no le veo mucho provecho a eso de ponerle forma pero bueno…
Con respecto a el contenido… Esto es difícil… En estos momentos me siento triste por muchas cosas. Pero, indudablemente, lo que más me acongoja es, el estar sola “sentimentalmente”, es como lo que más me pesa y lo que más detesto que me entristezca porque es algo sobre lo que no tengo control, y por lo general, no tener control sobre las cosas o situaciones me estresa y me hace pasar malos ratos.
Es evidente que no es lo único que me tiene en éste estado de congoja.
Si tuviera que graficar cómo me siento, sería algo como estar sola en una pieza no muy grande, ni tan chica, una pieza gris con una ventana con barrotes y yo en una esquina sentada rodeando mis rodillas con mis brazos.
Me siento mal porque, en este punto de mi vida, a mis 21 años, no hay nada que me mueva, no existe nada que me haga feliz, nada en lo que pueda apoyarme para seguir adelante con ganas de seguir viviendo.
Me siento mal porque miro a mí alrededor y veo que todos siguen con sus vidas y la mía está estancada.
Me siento mal por no tener la fuerza para sacarme del estancamiento en el que siento que estoy.
Me siento mal porque nadie lo sabe y por lo mismo nadie me ayuda y eso acrecienta mi soledad, esa que sólo yo veo y que casi nadie percibe.
Me siento cobarde, sin agallas. Con miedo a las cosas nuevas, a los cambios, a desafíos que pienso no podré afrontar con altura de mira y con miedo a salir derrotada de ellos.
Eso… en eso radica mi tristeza,
en temores y puntos frágiles que no puedo fortalecer.
Entre un mundo desconocido y otro por conocer.